La Inspección Técnica de Edificios en Madrid (ITE) es un sistema por el cual se valora de manera objetiva el estado de un inmueble, haciendo especial hincapié en la seguridad y estabilidad del edificio.
Esta inspección es de carácter obligatorio. Las ordenanzas municipales son las encargadas de recoger los plazos de presentación y en caso de no existir la legislación nacional vigente establece que tienen que pasar la ITE todos los edificios de más de 50 años.
A partir de esta edad, cada 10 años hay que pasar una nueva inspección.
Objetivo: la seguridad del inmueble
La Inspección Técnica de Edificios tiene un fin claro: garantizar la seguridad de los inmuebles de Madrid. Son muchos los factores y agentes que pueden ocasionar daños a las distintas partes de un edificio y es necesario comprobar que sigue siendo seguro para propietarios, trabajadores y transeúntes.
En qué se centra la ITE
La valoración del estado de un edificio se realiza comprobando el estado de la cimentación del inmueble; comprobando el estado de muros y medianeras; verificando la estanqueidad; el estado de las cubiertas, azoteas y fachadas.
Asimismo se comprueba el estado de las instalaciones de saneamientos, de fontanería, de luz… También entra dentro de la inspección revisar el estado de las zonas comunes como escaleras, patios, sótanos y el buen estado de las barandillas, pasamanos o ascensores.
Informe de idoneidad
En el caso de que la revisión constante que todo está en orden el técnico homologado que ha realizado la ITE emite un certificado de idoneidad. Este documento acredita el estado de un inmueble durante 10 años.
En el caso de que se detecten fallos, el técnico emitirá un dictamen desfavorable. En él se describirán y localizarán los problemas y a la vez se determinarán las medidas de seguridad y los trabajos pertinentes para resolver el problema.
Una vez que los propietarios del edificio hayan subsanado los fallos se comprobará la seguridad del inmueble y se emitirá el certificado de idoneidad.
No pasar la Inspección Técnica de Edificios en Madrid puede implicar multas que pueden alcanzar los 6.000 euros y a la vez ocasionar problemas a los propietarios como, por ejemplo, la no concesión de un préstamo hipotecario.